PORFIRIA De mirtos coronada en medio de las flores, te he visto yo, Porfiria, en mi sueño de amor. Mas al llegar al sueño, al final ya despierto, vino el hada de la noche, besóme y se alejó. ¿ Qué fue de tu belleza ? ¿ Qué fue de tu hermosura ? ese mirar de fuego que el mundo pregonó Todito lo has perdido por ambiciosa y necia, de Dios has recibido la eterna maldición. Al pensar en el futuro edén que con tu amor iba yo a realizar mi corazón palpita de placer al ver cercana la felicidad. Pero la mano del destino cruel, estrella vil que el destino guió con su artero brillo vino a apagar los destellos de mi corazón. de Felipe Pinglo